PARA MACRI, EL GOBIERNO TUVO LA CULPA
En una vuelta dialéctica insólita, el Jefe de Gobierno de la Ciudad,
Mauricio Macri, culpó al gobierno nacional por las agresiones y gritos
antisemitas sufridos por Axel Kicillof y su familia a bordo de un
buquebus.
"Los escraches hay
que atribuirlos al estado de tensión que genera el gobierno" disparó
suelto de cuerpo el ingeniero. Repitiendo el sonsonete de que el
gobierno "divide a la sociedad entre buenos y malos" y aclarando -por
las dudas, no vaya a ser que se olvide lo dictado por su asesor Durán
Barba- que "no estoy de acuerdo con los escraches, sobre todo si está
con su familia" Macri volvió con su ya consabido juego de agredir
poniendose en víctima.
Por eso, sostuvo que "en 2015 ganar es
lo menos importante, el desafío es volver a unir a la Argentina" en
declaraciones a "Cada mañana" de su aliada Radio Mitre, dejando de lado
que la agresión con cantos antisemitas surgió de un sector de los
pasajeros cuando Kicillof estaba con su familia regresando de sus
vacaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario